jueves, 2 de febrero de 2012

Hispanilandia

Pues si oiga, hace frío de aúpa en Finlandia. He estado a -20C, a la entrada de las oficinas de un cliente, y cuando un compañero por fin llego a buscarme, no sentía la cara oiga, me la tocaba, y parecía que no era mío el pedazo de mármol helado rozaba mis dedos.
Me decía un taxista de vuelta al aeropuerto que el gobierno obliga a que todos pongan ruedas de nieve en diciembre. No me extraña, menos mal que el mío las tenía, cuando conducía a 120 por la autopista, a la oficina esta en Salo, a hora y media de Helsinki.

La sorpresa fue que me encontré con unos compañeros de Reynosa y uno de Barcelona. Nos fuimos luego a cenar, y mientras observaba uno de los tres únicos restaurantes en una ciudad de 10,000 habitantes (eso me dijeron), me di cuenta de que todos los que estábamos en la mesa éramos hispanos en Finlandia, hispanolandia oiga...